Cuando se trata de un encuentro con la policía, cada palabra, cada movimiento y cada decisión cuenta. Ya sea que te detengan mientras manejas o que lleguen a tu casa, conocer tus derechos y cómo comportarte puede ser la diferencia entre continuar tu día o enfrentar consecuencias legales.
Encuentros con la policía en tu casa
Si la policía llega a tu casa, lo primero que debes saber es que no pueden entrar sin una orden firmada por un juez. Puedes hablar con ellos sin abrir la puerta, y tienes derecho a preguntar si tienen una orden de cateo o de arresto. Si no la tienen, no estás obligado a dejarles pasar. Muchas personas permiten el acceso por miedo o por no saber que pueden negarse. Esa decisión puede tener implicaciones legales graves.
Lo que debes y no debes hacer si te detienen en tu carro
Durante una detención vehicular, mantén la calma, baja la ventana parcialmente y entrega tus documentos si te los piden. No hagas movimientos bruscos ni te bajes sin que te lo indiquen. Tienes derecho a guardar silencio y a no contestar preguntas incriminatorias. No estás obligado a que revisen tu carro sin una orden o causa probable. Decir “no doy mi consentimiento para que revisen el vehículo” es una frase legalmente válida.
¿Debes permitir que revisen tu mochila, teléfono o pertenencias?
No. Tienes derecho a negarte a una revisión de tus pertenencias si no hay una orden judicial o causa probable clara. Muchos no saben que permitir una revisión voluntaria anula el derecho a impugnarla más adelante. La policía puede preguntar como si fuera obligación, pero muchas veces están esperando que accedas voluntariamente.
Errores comunes al interactuar con la policía
Uno de los errores más graves es hablar de más o querer justificarte en el momento. Muchas personas terminan diciendo cosas que luego se usan en su contra. Otro error frecuente es alterarse, resistirse o discutir en el momento. Incluso si tienes razón, ese no es el lugar para argumentar.
Por qué nunca debes “pelear tu caso” en la calle
El momento para defenderte no es en la calle ni con la policía: es en la corte y con tu abogado presente. Si resistes o discutes en el momento del arresto, podrías enfrentar cargos adicionales. Mantén la calma, guarda silencio y pide hablar con tu abogado. Eso es ejercer tus derechos, no “actuar culpable.”
La importancia de contar con un abogado desde el principio
Desde el primer momento en que crees que podrías estar en problemas —ya sea por una detención, una orden pendiente o una visita policial— debes buscar ayuda legal. Un abogado puede intervenir antes de que se presenten cargos, evitar errores que perjudiquen tu caso y ayudarte a protegerte desde el inicio. No esperes a que sea demasiado tarde.
